ÚLTIMOS DÍAS EN EL PERIGORD

Lunes 19 de agosto de 2013

Ya hemos pasado la primera semana de viaje. Cómo corre el tiempo cuando disfrutas.

El sábado por la mañana fuimos a Sarlat porque era día de mercado. No se podía andar por el pueblo porque los puestos los ponen por las calles. No he visto más tenderetes en mi vida. Es como si el mercadillo del Charco de la Pava lo multiplicásemos por 4. y en medio de la ciudad por calles estrechas de planificación medieval. UNA LOCURA¨. Pudimos comprobar que se venden las mismas cosas que en España pero a un precio más caro. Ejemplo: oferta de babuchas 35 euros. No eras babuchas de diseño ni mucho menos, ni babuchas de coleccionistas porque se las ha puesto Tom Cruise. Era babuchas de las de toa la vida de esas que a los dos meses estás enseñando el dedo gordo por la delantera. En fin que no compramos babuchas. Lo que sí compramos, por su puesto, fueron algunos recuerdos que la contramaestre tenía archivados en su disco duro. Luego nos pasamos por el Carrefour a realizar algunas comprillas de productos frescos pa que no nos entre escorbuto.

Desde que llegamos al camping tenemos por vecinos a una pareja catalana con sus tres hijos. Por las tardes solemos charlar un ratillo con ellos e intentamos cambiar el mundo. Es muy agradable compartir puntos de vista con personas de otros lugares, te hace ser mucho más tolerante y sobre todo conocer otros puntos de vista tan importante ante el fundamentalismo ideológico de hoy en día

El dominguito nos fuimos a ver otros pueblos medievales. En uno entramos en un bar e intentando explicarle al camarero lo que queríamos me dijo: ¿ españoles? Si.. Yo de Jaén. Así que a partir de ese momento nos entendimos mejor

Terminamos en una playa fluvial donde nos bañamos en el río Dordoña rodeados por un paisaje embriagador.

Hoy lunes es el último día que pasamos en la zona. Nos iremos con un grato recuerdo de sus pueblos, sus paisajes, sus gentes... Por la mañana hemos visitado un vivero porque a Anabel le gusta llevarse plantas del lugar como recuerdo y la tarde la dedicaremos a preparar la nave para partir mañana

a a descubrir nuevos lugares.

Ha sido una semana estupenda. Correr por las tardes por los bosques viendo manadas de ciervos, descubrir pueblos sacados de una máquina del tiempo, probar vinos quesos y patés cuyos sabores se quedan impregnados en tu memoria, conocer personas de otros lugares con los que charlar y tomar unas cervezas y sobre todo compartirlo todo con mi contramaestre y mi grumetillo. No se puede pedir más.

Mañana partiremos hacia las costas de Las Landas, el Perigord siempre estará con nosotros.

Continuará