martes, 15 de agosto de 2017
Aumenta la tripulación
¿A dónde se fueron los héroes de mi juventud?
¿Dónde estarán?
No pudo ser. El intento de subir al polizón a una cumbre fracasó por completo. Después de llevarse toda la noche con pesadillas soñando que se despeñaba cual cabra montesa, tuvimos que cambiar la ruta y hacer otra sin cumbres por medio. Creo que va a costar reeducarlo.
La cosa se ha complicado porque ha aparecido la nave de Alberto y María Jesús. Ahora tengo que gobernar a dos más. Haciendo una breve presentación de los nuevos diré que María Jesús es la hermana del capitán más conocida como la "Carmen Lomana" de los campings y Alberto su sufrido marido. Espero que mi cuñado, persona cabal y avezado explorador, me ayude a poner firme a esta tripulación.
Nada mas llegar la nueva nave pusieron nuestro campamento como un poblado chabolista con gayumbos y calcetines tendidos por todas partes. La cosa se complica; voy a tener que pasar a alguno por la quilla.
Hoy hemos realizado una ruta por el bosque hasta encontrar el nacimiento de un río local. He avisado antes de salir: los ríos no nacen abajo sino arriba y en el bosque hay plantitas que hacen pupitas. Nadie me hizo caso y se pusieron pantalones cortos como sin fuesen a comer sardinas a Chipiona. Así han terminado las criaturas con las piernas como un rayador de pan. Menos el experto y avezado capitán que llevaba sus pantalones largos. María Jesús además ha pegado un "trompazo" en el suelo al final de la ruta que se ha dejado parte de las rodillas en el barro. Con su orgullo herido y dolorida, su preocupación es que no le queden marcas para que no se vean con la minifalda.
Al que si estoy consiguiendo cambiar es a Platón, el pijiperro de José Luis. En esta ruta ha salido del armario y se ha convertido en perro. Se ha embarrado, ha corrido, se ha revolcado por los suelos... lo normal de un perro pero la criatura solo se había arrastado hasta ahora por almohadones de Zara Home.
Tengo que decir que el capitán pilló una indigestión de cordero al horno. Tal fue la cantidad de cordero que le pusieron que veía a una oveja y le gustaba y todo. Bueno mejor pillar una indigestión de cordero que de agua como mi amigo Pablo.
Mañana partiremos de los Ancares hacia Asturias. Esperemos que encontremos sitio en un camping y no tengamos que dormir en el parking del Carrefour.
Continuará.
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